Escoger una de las calderas que tenemos a tu disposición en Padrón es una decisión bastante más importante de lo que parece: de ella dependen tu confort diario, el gasto en calefacción y hasta la durabilidad del sistema. Así que no deberías caer en la tentación de comprar la primera que encuentres, sino de analizar qué modelo se ajusta realmente a tu vivienda y a tus necesidades. Para que puedas tener la certeza de que te quedas con la mejor, en Dislume te asesoramos con mucho gusto y, además, ya que has llegado a este artículo, te contamos los cinco aspectos que conviene tener en cuenta antes de decidirte.
1. El tipo de combustible
El combustible de una caldera condiciona la instalación y el coste a largo plazo. Y hay varias opciones al respecto:
El gas natural es la alternativa más común y económica en zonas urbanas.
El propano y el gasóleo son opciones habituales en viviendas rurales, aunque requieren un depósito.
La biomasa (pellets), una opción al alza, destaca por ser ecológica y rentable, aunque necesita espacio para el silo.
Por su parte, las calderas eléctricas pueden resultar útiles en casas pequeñas o como apoyo a la energía solar, aunque con un mayor consumo energético.
2. La eficiencia energética
Tengamos en cuenta que una caldera eficiente no solo reduce el consumo, sino también disminuye la factura mensual. Las de condensación son hoy la tecnología más recomendada e incluso obligatoria en muchas instalaciones. Su funcionamiento aprovecha el calor del vapor de agua generado en la combustión, logrando un rendimiento muy superior al de modelos convencionales.
3. La potencia necesaria
Ni más ni menos: una caldera debe ajustarse a las dimensiones y características de la vivienda. Factores como los metros cuadrados, el aislamiento, la zona climática y el número de baños influyen directamente en la potencia que necesitas. Un cálculo profesional evitará problemas de falta de calor o un consumo innecesario por exceso de capacidad.
4. Producción de agua caliente sanitaria (ACS)
Si la caldera también se encargará del agua caliente, hay que valorar cómo se usará. Las calderas instantáneas calientan el agua al momento y son perfectas para viviendas con un baño. En cambio, los modelos con acumulación incluyen un pequeño depósito que garantiza un suministro constante, ideales para casas con varios baños.
5. Espacio y ubicación de la caldera
El lugar disponible para la instalación también es clave:
Las calderas murales son compactas y se adaptan bien a cocinas o cuartos de lavado.
Las de pie están pensadas para viviendas grandes, con más potencia y mayor tamaño, y suelen instalarse en sótanos o cuartos técnicos.
Tu tienda de calderas en Padrón
Como ves, elegir una caldera requiere valorar distintos factores técnicos y prácticos. Para que todo salga perfecto, en Dislume, tu tienda de calderas y calefacción en Padrón, te ayudamos a comparar opciones y a seleccionar la que mejor se adapte a tu vivienda. ¡Contacta con nosotros desde aquí!